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SEGURIDAD, ARMAS, DROGAS, AMENAZAS y PLANES

Publicado: 2010-07-31

 

Ha salido el primer número de Foreign Affaris - Latinoamérica, y acá nos llega una interesante sinópsis y análisis para los que gustan de temas de seguridad e inteligencia:

SEGURIDAD, ARMAS, DROGAS, AMENAZAS y PLANES

 Por Andrés Gómez de la Torre R. *

 Provocador y atinado para las complicadas coyunturas, es el primer número de la revista Foreign Affairs – Latinoamérica (2010). Armas, cooperación militar y narcotráfico es el sugestivo título que engloba a tres interesantes ensayos, que a continuación cometamos y aderezamos, los que resultan ser muy ilustrativos para enriquecer diversos debates de actualidad. 

 El primero de ellos, corresponde a Daniel Flemes y Detflef Nolte; Alianzas externas para armamento y defensa. Una nueva dimensión en la agenda de seguridad latinoamericana. Los autores señalan los evidentes y crecientes vínculos recíprocos, y el fuerte incremento de relaciones militares activas entre  consumidores y abastecedores en nuestro vecindario: Brasil & Francia, Venezuela & Rusia, Colombia & EE UU y Chile asociadamente diversificado (EE.UU., Holanda, Alemania, Francia, Israel y UK). Las recientes adquisiciones militares y el aumento de estos gastos en América del Sur se han vuelto moneda corriente en la prensa internacional, que apuesta por la línea de atemperar la posibilidad de próximos conflictos interestatales en la región, suavizando, inclusive, el grave incidente de Angostura (marzo del 2008) que pudo haber sufrido en su momento una dramática situación de escalada. . Por su parte, la aviación Ecuatoriana (FAE) se va concentrado en estos últimos tiempos en la modernización de su escuadrón  IAI Kfir C-10E y en la compra de otro de Cheetah – C a Sudáfrica, con el objetivo de contrapesar la modernización de su contraparte Colombiana (la FAC). Se señala igualmente en el ensayo la frustrada propuesta presidencial peruana del Pacto de No Agresión o Anti-bélico, que nos lleva al histórico y épico Pacto Saavedra-Lamas de 1933; y se abordan también las diferentes y disímiles percepciones existentes sobre seguridad en la región, y la propuesta de Chile de uso de la Metodología Estandarizada Común elaborada por la CEPAL (2001) y empleada con Argentina para medir gastos militares en el área. Éste último tema ya se ha venido dando entre Lima y Santiago, pero está paralizado por falta de apoyo financiero multilateral del PNUD.

 Respecto de UNASUR y su pomposamente naciente Consejo Sudamericano de Defensa (CSD), éste imitaría a los organismos multilaterales como la ONU y OEA en materia de elaboración de registros propios de Armas Convencionales como parte de la confianza y transparencia  con que se encauzaría el tema; y así también abarcaría el asunto de las notificaciones sobre acuerdos o convenios de cooperación en el rubro, con énfasis en el tema de las bases militares, en el que Colombia desencadenó todo un amplio intercambio verbal y diplomático, a raíz de su reciente “agreement” con los Estados Unidos, y el cual precisamente fue la agenda central durante la reciente visita de la Secretaria de Estado Clinton a Ecuador. Nos queda un fuerte sabor de inseguridad e incertidumbre como reflexión final.

 El segundo trabajo, pertenece a Athanasios Hristoulas: Algo nuevo, algo viejo. La Iniciativa Mérida y la lucha contra el narcotráfico. Éste ensayo aborda la polémica acerca de reformas policiales, Comandos Unificados, tráfico de armas, y crimen organizado/asociado, así como las vulnerabilidades conceptuales de la tremenda iniciativa norteamericana en México por estar direccionada unifocalmente a un aumento ostensible del poder de fuego, movilidad y equipo tecnológico del ejército mexicano. Aleccionadora es su visión en una coyuntura de cuestionamiento a la funcionalidad del “Mérida”, espejo de otros “planes”, como en Colombia (Plan Colombia – 2000) y Perú (Plan – VRAE 2006), dada su vulnerabilidad manifiesta en el escaso reforzamiento de los vectores no militares. El tema de los eslabones o cadenas, es tocado por Hristoulas cuando centraliza en la guerra contra las drogas las tres fases: producción, distribución y consumo; viniéndonos a la mente el excelente Dictamen y Ley sobre Insumos Químicos y Precursores (sin reglamentar aún, por disputas “inter-agenciales” entre SUNAT y MINCETUR)  elaborada en la Comisión de Defensa Nacional, Orden Interno, Inteligencia, Desarrollo Alternativo y Lucha contra las Drogas del Congreso anterior, cuya autoría intelectual es Yalile Martínez, destacada abogada y ex asesora parlamentaria de la Comisión, hoy en el sector privado. Anotamos, para terminar, que el autor es profesor de un interesante Diplomado de estudios en Seguridad Nacional, Fronteras y Migración en el ITAM de México.        

 En el tercer texto, un  conocido, experimentado y prestigioso académico argentino, Juan Gabriel Tokatlián, toca, como acostumbra, fibras sensibles sin tapujos en La Guerra antidrogas y el Comando Sur. Una combinación delicada.

 Nos recuerda que la “cruzada” antidrogas sigue apostando en los Estados Unidos al ángulo represivo y punitivo, cuya más tangible manifestación puede constatarse en el traslado del centro de gravedad de la toma de decisiones de Washington a Miami (SOUTHCOM, Comando Sur).  El transvase de la legislación de seguridad nacional de Estados Unidos (desde la Posse Comiiatus Act), llevado a cabo para ampliar el rol de los militares en tareas antidrogas, es un ángulo fundamental para entender la filosofía de los programas de ayuda militar y policial sobre la materia en el hemisferio. Un completo barrido de la infraestructura militar operacional de los Estados Unidos en materia de lucha contra las drogas hacia América Latina, es incluido en el estudio, junto a la famosa frase del general James Hill, acerca de la grave amenaza que representa el “populismo radical”, concepto acuñado, no inserto dentro del listado de nuevas amenazas, en la Declaración de México de 2003 sobre Seguridad en las Américas de la OEA.

 En otro bloque de artículos de este primer número de Foreign Affairs – Latinoamérica no podemos dejar de mencionar, en el contexto de la controversia peruano–chilena sobre límites marítimos, actualmente ventilada ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya,  el aporte de los profesores argentinos  Roberto Luchi y Ariel Llorente: La disputa por las papeleras del río Uruguay. Resolución alternativa de disputas.  Acá, los autores describen con singular detalle este complejo proceso, sobre el que finalmente recayó hace muy poco una sentencia vinculante final, que muestra que cualquier solución judicial emitida por dicha instancia resultaría hoy, felizmente, en América del Sur, prácticamente imposible de desconocerse o no acatarse, en una coyuntura de la “tercería” Ecuatoriana, al  constituirse dentro del proceso en La Haya. Esto, adicionalmente, pondrá a prueba a Torre Tagle y su funcionalidad y capacidad de construir alianzas y contrapesos regionales, particularmente  cuando nuestro actual vice ministro de Defensa -diplomático de carrera- acaba  desempeñar el cargo de embajador en Quito.

 Finalmente, encontramos el ensayo La responsabilidad de Proteger, tres pilares y cuatro crímenes, del chileno Heraldo Muñoz, sobre el genocidio y derecho humanitario. Al autor, militante socialista (PS), lo conocimos en su dimensión de académico en 1985 y 1986, en Lima, en el Centro Peruano de Estudios Internacionales (CEPEI), y en Santiago, siendo por entonces un destacado activista opositor al régimen militar de Pinochet, en el comando por el NO, el Acuerdo Nacional, y dentro del contexto de creación  del naciente Partido por la Democracia (PPD)  y la entonces embrionaria Concertación de Partidos por la Democracia.

 Muñoz, politólogo e internacionalista, haría luego una impresionante carrera pública desde 1990, con la vuelta a la democracia: Embajador ante la OEA (1990-1994), Embajador en Brasil (1994-1998), manager de la campaña presidencial de Ricardo Lagos (1999-2000), Subsecretario de Relaciones Exteriores (2000-2002), Ministro Secretario General de Gobierno (2002-2003), y Embajador en Naciones Unidas hasta marzo pasado, donde sería recontratado como alto funcionario de dicha organización. Su última obra La sombra del dictador, presentada recientemente en Madrid, con el célebre juez Baltazar Garzón de comentarista, es una impresionante y bien elaborada evaluación del Chile contemporáneo en materia política e internacional.             

 Como vemos, hay mucho que leer en esta importante publicación dedicada a analizar los problemas de un sobresaltado hemisferio, desde una visión asépticamente independiente. 

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* Corresponsal de la revista “DEF” Seguridad & Defensa Argentina en Lima. Asesor empresarial privado en asuntos de defensa e inteligencia estratégica.

 


Escrito por

Eduardo Abusada Franco

Ya olvidé cuántas veces intento mantener un blog. Bueno, aquí voy una vez más. Sólo para bularme de mí mismo y tener donde renegar.


Publicado en

El Hocicon (blog pobre, pero honrado)

Para burlarme de mi mismo y renegar un poco